La noche en que Frankestein leyó al Quijote- Santiago Posteguillo
By Anillos y Varitas - mayo 17, 2017
Sinopsis

Santiago
Posteguillo

Colaborador de medios
como Las Provincias, su carrera literaria se inició en el año 2006 con la
publicación de Africanus, obra de carácter histórico situada en la Antigua
Roma, primera de las entregas que dedicó a Escipión el Africano y que supuso un
gran éxito de ventas.
Posteriormente, y siempre
dentro de la novela histórica, repitió con Roma en la trilogía de Las legiones
malditas, logrando de nuevo el aplauso del público y de la crítica
especializada. Además, también ha publicado varios ensayos y cuentos sobre
anécdotas y hechos curiosos sobre la literatura y los escritores, como La noche
en que Frankenstein leyó El Quijote.
A lo largo de su carrera
ha recibido premios como el de las Letras Valencianas 2013 o el Hislibris de
2009.
Opinión.

No solo explica las
obras, explica su contexto, nos expresa la idea, el proyecto que hubo detrás de
Mary Shelly y la obra de Frankestein, la ayuda que recibió Alexandre Dumas para
escribir sus grandes obras, la muerte de Marlow y el surgimiento de Shaskepeare
¿fueron la misma persona?
En mi opinión, delicada y
trepidante nos recrea las obras haciendo a su lector verlas y descubrirlas de
una forma totalmente diferente. Es te es el primer volumen, pero hay otro que
ha sido editado, en España, recientemente llamado La sangre de los libros
Puntuación
10/ 10
Un viaje a través de la
literatura
4 comentarios
Me gusta ver o leer a Posteguillo fuera de su zona de confort...tengo el libro más que anotado, pero no se cuaaaaaaando le tocará el turno.
ResponderEliminarUna reseña estupenda.
Un besito.
Espero que lo leas pronto ;)
ResponderEliminarUn besito muy grande :)
Sí, lo leí después de La sangre de los libros, porque me gustó y confirmo que este también me gustó. Me pareció muy interesante que presentara todos esos datos de forma novelada, me pareció muy entretenido.
ResponderEliminarUn saludo,
Laura.
Me alegra que te gustara. Es adictivo.
EliminarUn beso