Esta
sátira de la Revolución rusa y el triunfo del estalinismo, escrita en 1945, se
ha convertido por derecho propio en un hito de la cultura contemporánea y en
uno de los libros más mordaces de todos los tiempos. Ante el auge de los
animales de la Granja Solariega, pronto detectamos las semillas del
totalitarismo en una organización aparentemente ideal; y en nuestros líderes
más carismáticos, la sombra de los opresores más crueles. «Una obra literaria
perfecta.» T.S. Eliot
George Orwell cuyo seudónimo de Eric Blair; Motihari, India, 1903 - Londres, 1950) Escritor británico. Estudió en el Colegio Eton y luego formó parte de la Policía Imperial Inglesa en Asia, experiencia que lo llevó a escribir Días en Birmania (1934). Vivió varios años en París y en Londres, donde conoció la pobreza; de este difícil período de su vida nació su novela Sin blanca en París y en Londres (1933).
Estamos
ante una de las novelas que han marcado al siglo XX, fue una de las primeras
del autor y que le llego a cosechar y cultivar el enorme éxito que posee.
Estamos ante una historia, fabula (podríamos decirlo así) que se divide entorno
a una estructura a base de capítulos, son diez capítulos, ya que la extensión
de la novela no es muy extensa, acompañada por un prologo del autor, muy
interesante, que ahora explicare.
Siguiendo con los
aspectos formales en relación con el estilo, es simple con u vocabulario muy
sencillo y con un gran sentido del humor. La temática principal se basa en una
sátira (la mejor, que yo haya leído) sobre la Revolución Rusa y el posterior
régimen comunista.
Desde
antes de la publicación de la obra tubo muchos problemas, en un primer momento
las editoriales nos deseaban publicarla ya que en ese momento Rusia pertenece
al bloque de los Aliados; luego, además, se prohibieron en todos los bloques
comunistas, hoy en día lugares como China o Corea de Norte, siguen estando prohibidas.
Debido
a este problema de prensa el autor, George Orwell, decidió incluir un prefecto
donde defiende el derecho de libertad de prensa, que la sociedad (no solo la
soviética o el grupo comunista) prohíbe de forma directa o indirectamente, es
decir o atreves de leyes o prejuicios.
La
novela tiene una estructura muy sencilla, y posee un ritmo ágil y divertido que
recuerdo a las fabulas infantiles. Pero con un significado muy complejo donde
se puede estudiar y reflexionar mucho. Por esos no es extraño encontrar
muchísimas referencias, no solo a la política contemporánea del autor y los
problemas sino además muchos aspectos simbólicos.
Ya sea desde el
primer himno “Bestias de Inglaterra” que hace referencia al Himno de la Primera
Internacional y su posterior caída, en ambos casos. Encontramos referencias no
solo en el nombre de los personajes (Chillón, Boxeador, Napoleón) que sin un
género de duda alude a una capacidad de estos mismos, sino que además
establecen paralelismos entre ellos y un personaje histórico; por ejemplo,
Napoleón representa a figura de Stalin, o la figura del Sr. Jones representa al
zar Nicolás II.
Es
una obra estupenda, donde a pesar de su sencillez en estilo y prosa el autor
consigue satirizar de una forma magistral todo el proceso comunista de Rusia.
Llena de guiños hacia personajes reales e hitos del propio comunismo. Donde
resalta de una forma perfecta todos los problemas
8.5/10
Una
sátira tan cómica como trágica.
2 comentarios
Esta novela nos hicieron leerla el mismo año en dos asignaturas diferentes: Filosofía y Sociología, y en cada una de ellas llegamos a sacar distintas interpretaciones y similitudes con la realidad dependiendo del foco desde el cual mirábamos la lectura, fue alucinante.
ResponderEliminarBuena reseña.
Besitos.
Muchas gracias por tu comentario, me alegro que te gustara el libro, a mi me ha impresionado.
Eliminarun beso